¡Deja de procrastinar! 5 pasos para ganarle al “mañana lo hago”

Publicado el 20 Sep 2018, En #comunicaciones

Foto: Unsplash

 

Este artículo no es para personas que se conforman con lograr grandes cosas una o dos veces en su vida. Este artículo es para personas que desean lograr varias cosas importantes cada año.

 

Nacional.- Es mejor hacer cualquier cosa a diario que esporádicamente. Si haces algo a diario, tus posibilidades de dominarlo son muy altas. En este sentido, el desafío (y el beneficio oculto) es que solo hay 24 horas en un solo día y esta restricción de 24 horas te obligará a decidir lo que realmente te importa.

 

Si aprendes a priorizar tu vida y tu tiempo, entonces puedes hacer varias cosas importantes durante un año. Cuando desarrollas consistencia, también desarrollas impulso. Con el impulso viene la confianza y una mayor motivación. Con confianza y mayor motivación viene la inspiración y las ideas audaces. Si no eres coherente, te estás perdiendo todos los beneficios psicológicos que se extienden en una vida de éxito.

 

La trampa de creer que necesitas muuucho tiempo para hacer algo importante

Si tu intención es alcanzar grandes objetivos o proyectos, como iniciar un negocio, escribir un libro, comenzar la dieta, etc., es fácil caer en la trampa de trabajar solo cuando tienes 3 o más horas de tiempo. Aquí está el proceso de 5 pasos y cómo funciona:

 

1. Establece claras prioridades

Si no puedes incluir algo en tu agenda diaria, probablemente no sea tan importante para ti. Porque al igual que aprender un nuevo idioma, no necesitas más de 15-30 minutos por día. Si haces algo constantemente, incluso durante unos minutos todos los días, comenzará a convertirse en una rutina principal y en una parte más importante de tu vida.

 

2. Diseña tu rutina diaria

Mañana y tarde: estos son los tiempos que necesitas aprender a optimizar. La mayoría de la gente desperdicia sus noches en un estado de auto sabotaje inconsciente, usualmente distrayéndose con comida poco saludable y tecnología que aturde la mente.

 

Aquí volvemos a la clave del tiempo “libre”: si algo se vuelve importante para ti, encontrarás el tiempo. Lo primero que haces en la mañana es un reflejo de cómo irá el resto de tu día. Si comienzas bien, tus posibilidades de continuar teniendo un día sólido son muy altas.

 

3. Usa la técnica de Pomodoro

La técnica Pomodoro es un método de administración del tiempo desarrollado por Francesco Cirillo a fines de la década de 1980. La técnica usa un temporizador para dividir el trabajo en intervalos, tradicionalmente de 25 minutos de duración, separados por descansos cortos.

 

Adquiere el auto compromiso de ocupar una cierta cantidad de tiempo para concentrarte en tu objetivo todos los días. Si son 10 minutos, concédete un temporizador de 10 minutos. Una vez que el temporizador se apaga, listo. Es muy importante que pares cuando dices que vas a parar. Lo más probable es que te sientas muy emocionado por haber hecho incluso 10 minutos de trabajo concentrado en algo que has postergado durante mucho tiempo. 

Repite la secuencia mañana.

Y al día siguiente.

Y al subsiguiente.

Tus prioridades comenzarán a cambiar. Encontrarás más tiempo y eliminarás las distracciones no esenciales de tu día.

 

4. Cuéntale a tu amigo/a de confianza sobre tu nueva “hazaña”

Todas las personas necesitamos reconocimiento sincero, más aún cuando se trata del cumplimiento de una meta importante para uno mismo. Entonces, cada mañana, después de completar tu “pomodoro”, cuéntale a tu amigo/a de confianza sobre tu desafío, los avances que estás teniendo, aquello que te limita, y verás que verbalizando tus metas habrás dado un paso más para alcanzarlas.

 

5. La reflexión semanal

El proceso de aprendizaje requiere de una reflexión para observar tus fortalezas y oportunidades de mejora. Al finalizar la semana, considera 10 o 20 minutos de tu tiempo y reflexiona cómo has llegado hasta dónde estás, qué puedes corregir y perfeccionar en tu proceso. Esto te ayudará a fijar tus prioridades y a darte cuenta de que lo que haces, lo puedes hacer mejor.

 

Entonces, ¿qué necesitas para alcanzar tus metas, por pequeñas que sean?: priorización, planificación; ejecución; responsabilidad; reflexión; y mejora continua.

 

Tiempo tienes de sobra. Solo debes saber organizarlo para ser más exitoso y feliz… salvo que mañana decidas serlo.

 

Fuente: Thrive Global